Este Sant Jordi pongamos imaginación
La costumbre de regalar una rosa a una mujer y un libro a un hombre, viene de una tradición catalana que proviene del siglo XV. Una costumbre por la que a las mujeres que asistían a la misa a la capilla de Sant Jordi del Palau de Generalitat, el día 23 de Abril, se les regalaba una rosa.
Una tradición que hace que se intercambien rosas y libros entre las parejas y las personas queridas.
Así mismo, existe una leyenda popular que describía la existencia de un dragón que envenenaba y mataba con su aliento, y que como consecuencia de ello, tenía atemorizados a los habitantes de un pueblo de Tarragona llamado Montblanc. Los habitantes de dicho municipio para calmar su furia, cada día le daban para comer a una persona que escogían por sorteo, un día le tocó a una princesa, pero entonces apareció un caballero de brillante armadura y caballo blanco, llamado Sant Jordi que rescató a la princesa atravesando al dragón con su espada. De la sangre del dragón brotaron varias rosas rojas, Sant Jordi cogió una para ofrecérsela a la princesa.
Esta leyenda hoy día, tiene más vigencia que nunca, nuestra actual situación sanitaria y el confinamiento derivado de ella, hacen pensar en la metáfora de este dragón que con su aliento envenenaba a todos, como si de este virus maligno se tratara, pero sin embargo, de la misma manera que Sant Jordi resurge para acabar con el dragón, nuestro Sant Jordi sanitario acabará igualmente como está descrito en la leyenda.
Nuestros sanitarios, al igual que SantJordi, acabarán como está descrito en la leyenda con este dragón/virus maligno que actualmente nos está envenenando a todos.
Por eso es tan importante para la ciudadanía catalana este día, aunque celebrar este día como hemos hecho cada año es imposible, por ese motivo, diversos intereses económicos ligados a esta celebración han propuesto un aplazamiento para el 23 de Julio como fecha alternativa. Una propuesta que viene de la La Cambra del Llibre, y del Gremio de Floristes. Pese a ello algunas voces reclaman celebrar este Sant Jordi tan singular desde casa. Lógicamente no tendría ningún sentido abrir librerías durante el confinamiento, como tampoco tendría ningún sentido la gran afluencia de ciudadanos que este día sale a la calle.
Es por este motivo que creemos que el 23 de Abril, tiene que ser un día especial, lleno de emociones y profundos deseos que desde casa podemos compartir. Las nuevas tecnologías nos lo permiten.
Animar a la ciudadanía a ser partícipe de este día, nos obliga a todos y cada uno de nosotros, a tener cierta creatividad que permita hacer el día de Sant Jordi, una celebración diferente en el que la inventiva, la ilusión y la originalidad, pueda hacer llegar el mensaje a nuestros seres queridos.
Rosa Sant Jordi cwork
Desde cwork hemos puesto un poco de imaginación y hemos hecho nuestra rosa especial de Sant Jordi. Gracias a unos pequeños envases con un dibujo en su fondo al que hemos incorporado una pequeña rosa de tela.
Un rosa a la que no le pasará el tiempo, que está encerrada entre las paredes del envase, y que espera a este nuevo Sant Jordi que sin duda le dé la libertad que debería tener.
Una rosa que en los próximos años nos recordará esta época difícil, Sant Jordi 2020, en la que impacientemente esperábamos a un Sant Jordi con su caballo blanco y su resplandeciente armadura, para que nos libre de la actual inquietud.
Feliz Sant Jordi!
Jaime de Oleza
Arquitecto
23.04.2020