La Fotogrametría, una nueva herramienta de trabajo
Ni que decir tiene, que los adelantos tecnológicos se han situado en un lugar predominante en nuestras vidas, y a todos los efectos, desde el ámbito familiar hasta el profesional. Los nuevos sistemas computacionales han invadido nuestra existencia, y profesionalmente han provocado multitud de cambios que han derivado en poder realizar nuestro trabajo de una forma más fácil, eficiente y sencilla. En el campo de la arquitectura y la ingeniería, estos avances han sido espectaculares y decisivos para la profesión, que van desde el proyecto arquitectónico hasta la misma construcción. Diversos programas informáticos han facilitado el trabajo de los proyectistas, dejando atrás los punteros de tinta, las mesas con las reglas, los lápices y gomas de borrar y largo etc. para incorporar ya desde hace muchos años, las pantallas de ordenador, las impresoras y los plotters.
Escaneado 3D de vivienda con Matterport
Herramienta que permite obtener mediciones y construir modelos tridimensionales de una forma relativamente sencilla.
Esta nueva sociedad digitalizada también ha llegado a lo que durante muchos años ha sido un proceso artesanal, que es la toma de datos en arquitectura. La fotogrametría, que como muchos otros vocablos de nuestro idioma provienen del griego, -Phos es decir luz, Gramma dibujo y metrón medir-, ha proporcionado a los profesionales de la arquitectura y de la construcción una nueva herramienta que les permite obtener mediciones y construir modelos tridimensionales de una forma relativamente sencilla. Y todo ello gracias a la fotografía. Basta con tener una cámara fotográfica digital, un equipo informático básico y un software específico de los que existen en el mercado. Unos programas informáticos que actúan como el ojo humano, y que permiten una visión estereoscópica en 3D, interpretando las imágenes fotográficas, para proporcionar de este modo los datos exactos de aquello que necesitamos visualizar. Son muchos los programas existentes en el mercado, como Photoscan, Photomodeler, 123 Catch de Autodesk, programas que permiten gracias a la restitución digital de las fotos que realizamos, obtener unos resultados muy precisos en los trabajos de levantamiento topográfico y arquitectónico.
Todo ello gracias a la fotografía, basta con tener una cámara fotográfica digital, un equipo informático básico y un software de los que existen en el mercado.
Las aplicaciones de la fotogrametría, van desde la topografía, cartografía, ortografía, arquitectura y hasta la arqueología. Una de sus características más destacadas, es que se realiza mediante una técnica no intrusiva, la fotografía, y que aporta un alto nivel de precisión. En definitiva, es un concepto sencillo de entender, que se basa simplemente, en la facultad de poder tener una medición sobre las fotografías que vayamos a realizar.
Una técnica que, gracias a la interpretación de las imágenes fotográficas, consigue múltiples ventajas sobre los procesos tradicionales del levantamiento y toma de datos, facilitándonos enormemente el trabajo, y proporcionándonos una magnitud exacta de aquello que queramos visualizar. Esta nueva técnica, se ha convertido en un sistema fundamental para el estudio y el análisis en la rehabilitación de los edificios. Como también simplemente, para poder tener una descripción detallada de los monumentos históricos-artísticos. En este aspecto la aparición de los drones ha añadido aún más si cabe, mayor utilidad a esta nueva herramienta, al poder tener una visual aérea del edificio con un bajo coste. Un proceso que de otra manera bajo la perspectiva de un proceso tradicional para la toma de datos, representaría un trabajo sumamente costoso a realizar.
Esta nueva técnica, se ha convertido en un sistema fundamental para el estudio y el análisis en la rehabilitación de los edificios y monumentos históricos-artísticos.
La fotogrametría se ha convertido en un referente muy útil en el ámbito de la representación y visualización arquitectónica, frente a otros métodos como la del escáner láser 3D. Dado que este último, tiene algunos inconvenientes que pueden llegar a limitar su utilización, como son el alto coste de los equipos informáticos, que como consecuencia de que la alta resolución de las imágenes, hacen necesario disponer de potentes equipos para su procesamiento, así como también el alto coste de inversión del software.
La fotogrametría es una nueva herramienta de trabajo que ha venido para quedarse, y además puede estar al alcance de todos. En este sentido, cada vez más, vamos a ver aplicaciones basadas en esta técnica. Un claro ejemplo ha sido su utilización, extremadamente necesaria, en la reconstrucción y análisis de las arquitecturas de las antiguas civilizaciones, una utilidad que nos permite poder admirar y disfrutar desde la arqueología, una visión tridimensional de nuestra historia. Un privilegio que tan solo unos años atrás, hubiera sido francamente impensable.
Jaime de Oleza
Arquitecto
01.09.2021